Aún no tenemos evidencia de que México esté captando las inversiones productivas que están saliendo de China para acercarse a Estados Unidos, el llamado nearshoring, advirtieron economistas de UBS.
Los datos sobre el flujo de Inversión Extranjera Directa (IED) que captó el país en el primer trimestre no son una señal de que México está atrayendo capitales productivos enmarcados en el nearshoring, consignaron en un análisis.
Información del Banco de México (Banxico) mostró que entre enero y marzo de este año, el país registró la entrada de 18,636 millones de dólares en Inversión Extranjera Directa.
Este es el mayor flujo de inversiones productivas en cuatro trimestres y evidencia un incremento anual de 17% real sobre todo al excluir del dato del año pasado, las entradas registradas por la fusión de Televisa con Univisión y la reestructura de Aeroméxico.
En el análisis, liderado por el economista jefe para América Latina en la firma, Rafael de la Fuente, detallaron que el 90% de la IED registrada en los primeros tres meses del año 2023, incorpora las utilidades reinvertidas por empresas que ya están establecidas en México.
En el análisis titulado “El boom de la IED por nearshoring que no llega (al menos todavía no)”, precisan que las nuevas inversiones registradas en el primer trimestre, son el registro más débil de este rubro desde el año 2014, excluyendo el año de la pandemia, el 2020.
“No queremos parecer “negacionistas” del nearshoring (de hecho, reconocemos el potencial de crecimiento de México a partir de este proceso), pero no estamos de acuerdo con la opinión de que los daros de la IED del primer trimestre confirman que las empresas ya están llegando a México”
Confirma Banxico que no hay evidencia
Apenas la semana pasada, la subgobernadora de Banco de México, Irene Espinosa, explicó a El Economista que la relocalización de las cadenas productivas y el interés de proveedores para estar más cerca de sus consumidores, si se está presentando. Esto se sabe “más por referencia anecdótica que por datos duros”
No tenemos una desagregación adecuada que nos permita identificar el porcentaje de las inversiones que están entrando como resultado del nearshoring, puntualizó.
Pero como sí tienen la intención de identificar como está presentándose este fenómeno hacia México, refirió que el año pasado Banxico realizó una encuesta entre 1,500 empresas que tienen más de 100 empleados con volumen suficiente para estar interconectados con empresas globales que quieren relocalizarse.
Entre los resultados sí se identificó que hay empresas interesadas en relocalizarse al país, así como proveedores para las cadenas de producción de Estados Unidos que están buscando instalarse en México.
Clima de negocios, medular
Para que se dé la reconfiguración de las cadenas productivas y lleguen más inversiones a México, tenemos que cumplir varias condiciones, entre ellas, como una premisa fundamental, mejorar el clima de negocios, garantizar la certeza jurídica y ofrecer disponibilidad de la infraestructura necesaria para llevar a cabo estos negocios, consideró la subgobernadora Espinosa.
El director de estrategia para Latinoamérica en el banco de inversión TD Securities, Joel Virgen también matizó las expectativas sobre el nearshoring desde noviembre del año pasado.
En entrevista explicó que el país, como el resto de América Latina, tienen el reto de generar confianza en los inversionistas.
Desde ese momento advirtió que esta relocalización esperada de inversiones no haría gran diferencia en el crecimiento de este año.
Otra analista que ha moderado las expectativas sobre el nearshoring, es la subdirectora de investigación económica de Monex, Janneth Quiroz, que reconoció la llegada de capitales para comprar terrenos en entidades cercanas al norte del país, pero enfatizó que todavía no se puede esperar que se traduzcan en producción.
Fuente:
Yolanda Morales-https://www.eleconomista.com.mx/economia/IED-que-atrajo-Mexico-en-el-1T-de-2023-no-refleja-aun-el-nearshoring-UBS-20230530-0073.html