Los depósitos ofrecen una solución efectiva que permite a los transportistas reducir el tiempo dentro de las terminales, pasando de horas a tan solo 45 minutos.
El transporte en los puertos mexicanos enfrenta un desafío significativo durante la “peak season” o temporada alta, cuando el volumen de mercancías aumenta considerablemente, generando congestión en la cadena logística. Para mitigar esto, el transporte multimodal ofrece una solución integral al combinar distintos medios de transporte (marítimo, ferroviario y terrestre), optimizando así la distribución de carga de manera más eficiente. Esta estrategia incluye el uso de depósitos, donde se almacenan y consolidan mercancías, lo que permite agilizar los tiempos de entrega y reducir los cuellos de botella en los puertos, mejorando la capacidad de respuesta logística.
Para la temporada alta de 2024, los puertos de Lázaro Cárdenas y Manzanillo experimentaron un crecimiento significativo en comparación con 2023. En el caso de Manzanillo, se anticipó un incremento del 8% en el manejo de contenedores, impulsado por un aumento en la demanda de bienes de consumo y productos manufacturados. Por otro lado, Lázaro Cárdenas proyectó un crecimiento del 7.5% en sus operaciones de carga, debido a la expansión de sus capacidades logísticas y la mejora en la infraestructura portuaria.
Mónica Ojeda, Area Head of Depot de Maersk, explica que, durante las temporadas de alta demanda, los depósitos juegan un papel crucial en diversas industrias, como la automotriz, la electrónica y la de bienes de consumo. Estos periodos, caracterizados por un aumento significativo en el volumen de mercancías, requieren una gestión eficiente para evitar interrupciones en la cadena de suministro. Los depósitos permiten almacenar y gestionar inventarios de manera estratégica, asegurando que los productos estén disponibles cuando y donde se necesiten. Además, facilitan la consolidación de cargas y la redistribución rápida de mercancías, lo que es esencial para cumplir con los plazos de entrega ajustados y satisfacer las expectativas de los clientes. Esta capacidad de respuesta es vital para mantener la competitividad y la satisfacción del cliente en un mercado dinámico y exigente.
“Sabemos que la toma de los contenedores en la terminal implica tiempos muy largos en fila, y en logística tiempo significa dinero. Es por ello que los depósitos se enfocan en cortar demoras y reducir costos a través de servicios que agilizan los tiempos de entrega de mercancía, así como cubrir los cambios súbitos que se generan en la cadena logística, permitiendo a los clientes actuar más rápidamente”, detalla Ojeda.
En los puertos mexicanos, especialmente en Manzanillo, Lázaro Cárdenas y Veracruz, el manejo del volumen de carga es un desafío constante. México es un país que mueve un gran volumen de mercancías a través de sus puertos, y todas las navieras operan activamente en estas instalaciones.
Uno de los principales retos en las operaciones portuarias es el tiempo que los camiones dedican a esperar para acceder a la terminal, y cargar o descargar, lo que genera retrasos y eleva los costos operativos. Los depósitos ofrecen una solución efectiva mediante un servicio conocido como shunting, que permite a los transportistas evitar los trámites complicados dentro de las terminales. Gracias a este servicio, el tiempo de atención se reduce significativamente, pasando de horas a tan solo 45 minutos. Esta optimización no solo mejora la productividad, sino que también minimiza costos asociados al tiempo ocioso de los transportes.
“El servicio de shunting es clave para mejorar la productividad de los transportes federales, ya que elimina la necesidad de que los transportistas pasen por el proceso de registro en la terminal. Esto ahorra tiempo valioso, ya que el registro de cada camión, la presentación de seguros y otros documentos son procesos que consumen horas. Al reducir el tiempo, los transportistas pueden concentrarse en sus trayectos largos, que son más rentables. Además, con este sistema se evita que los clientes tengan que pagar costos adicionales por demoras en la terminal o por la permanencia prolongada de los contenedores”, explicó Ojeda.
El uso de depósitos también proporciona una reducción de costos en la cadena. Al gestionar eficientemente los contenedores, los depósitos ayudan a los clientes a evitar cargos por estancias prolongadas en las terminales. Una vez que se supera el periodo en las terminales, cada día adicional genera costos que pueden impactar negativamente a las empresas. Mediante el uso de depósitos, los clientes pueden liberar contenedores con mayor rapidez, reduciendo así significativamente los costos derivados de las demoras o las estadías en los puertos.
Los depósitos también apoyan con el manejo de contenedores refrigerados. Estos equipos, que deben mantener la cadena de frío, requieren una gestión cuidadosa para garantizar que lleguen a la terminal en las condiciones adecuadas para su embarque. Ojeda explica que en puertos como Manzanillo, se ofrece este servicio especializado a los clientes recibiendo sus contenedores refrigerados, conectándolos para mantener el set point y asegurando la cadena de frío hasta su ingreso a la terminal en óptimas condiciones.
Maersk cuenta con presencia de depósitos en Lázaro Cárdenas (a 1.4 km de la terminal), Cuautitlán y Manzanillo, con planes de expansión a futuro. En un entorno logístico cada vez más competitivo, invertir en una logística integrada que aproveche el uso de depósitos es clave para mantenerse al día con las demandas del mercado. Especialmente durante la temporada alta, cuando los puertos se ven saturados y la demanda de transporte se intensifica, los depósitos se convierten en una herramienta estratégica. Ofrecen la flexibilidad necesaria para reducir tiempos de espera, minimizar costos operativos y garantizar la disponibilidad constante de inventario, permitiendo que las empresas mantengan su competitividad en un mercado dinámico y exigente.
